El extranjero calvo que entiende algunas palabras en mandarín es una prostituta en un hotel nacional y se le da bastante bien. Hace que la señora se ponga tacones altos y se siente en una silla alta para follársela.

The bald foreigner who can understand a few words of Mandarin is quite good at having sex with prostitutes in domestic hotels. He lets the prostitute sit on a high chair while wearing high heels.